Día 8: Emulsión
Día 8 se supone que he de escribir inspirándome con alguna canción, así que he elegido ésta de Audiomachine, que es un grupo musical de bandas sonoras con mezcla de instrumentos, voz... que siempre me ha gustado mucho.
La mayor parte de mi novela la estoy escribiendo con éste grupo de fondo, no sé me parece ¿mítico y fuerte? No sé, ya me dices que opinas.
Emulsión
La primera señal de cambio era un fuerte calor. Sentía que una ola caliente le bajaba por todo el cuerpo, relajandole cada músculo que estaba tenso, apartándole todas las ideas de la cabeza y haciendo que fuera perdiendo fuerza. Éste hecho hizo que cayera automáticamente al suelo. No sufrió dolor cuando su piel ardiente tocó la fría superficie, más bien fue un alivio. Dejó escapar un leve gemido,porque sabía que debía guardar fuerzas para gritar más. La transformación acababa de comenzar.
El calor desapareció dejando un fuerte dolor en cada una de sus extremidades, sentía como éstas se estiraban y desgarraban cada uno de sus tendones. Gritó en silencio, mordiéndose el labio y aguantando las ganas de vomitar.
Entre la fiebre, el dolor muscular y el ardor estomacal fue vagamente consciente como el dolor de su ingle y senos comenzaba a explotar. Odiaba esa parte, porque era cuando le hacía recordar que jamás podría ser madre. Jamás sus pechos se rellenarían de leche y nunca su matriz albergaría vida. Nunca.
Lloró en silencio mientras su cuerpo se iba destrozando por partes.
El cuero cabelludo comenzó a quemarle, al igual que las uñas y los dientes. Realmente no sabía que parte del cuerpo le dolía más, porque si se ponía a pensar en ello cuando quedara lo último posiblemente se moriría de dolor.
El dolor abandonó su cuerpo, no sentía nada hasta que su brazo derecho emulsionó por si solo. Unas llamas azules comenzaron a corroer su brazo, creando fea cicatrices que se teñían de un negro oscuro, pronto una especie de serpiente transparente con ojos negros la miró. Ella asintió y el animal abrió sus fauces y engulló su brazo entero. Notó los dientes clavándosele en el hombro, como los gases estomacales quemaban todo a su parte y al final un gélido contacto. Gimió de placer. Sólo quedaba la parte final, la última marca para que el ángel de la muerte volviera a nacer: Juliet Alphonse regresaba.
¡Wow! Me ha dejado sin palabras. ¡Cuánto misterio! Se te da muy bien mantener el suspenso y el final, te deja queriendo saber un pocos más ¡impactante! Por un momento, creí que moriría definitivamente D:
ResponderEliminar¡Me encantó!
Bye!
Se supone que Juliet Alphonse es la protagonista de "Piratas del Tiempo". Me hizo ganas hacer algo con ellas, quizás vuelva a hacer algo al margen de mi novela.
EliminarMe encanta que te guste. Nos seguimos leyendo.
Saludos