Ejercicio # 2: Perdón

Seguimos con el reto, si te quieres apuntar pincha AQUÍ, ya sabes, avísame e iré a ver lo que has escrito.

Hoy toca escribirle una carta a alguien que he perdido en un naufragio, se supone que después la lanzaré al mar para que él o ella la lea sea donde sea que esté...

Veamos que saco de ésto...




Perdón

Querido Jackson: 
Sea donde sea que estés quiero decirte que las niñas están bien. Sé que son una de tus mayores preocupaciones. Elizabeth está grande y comienza el colegio la semana que viene, mientras Jane ha dicho sus primeras palabras. Ojalá estuvieras aquí para verlas. 
La casa marcha bien. No te preocupes. Antes de irte dejaste en mi mano todos los documentos necesarios para vivir si tú no estuvieras. En ese entonces pensaba que quizás tenías intención de no volver. ¿Sabes? Estaba tan molesta contigo. Tanto. 

El tiempo está pasando y aún no encuentran rastros de tu cuerpo, así que supongo que tendré que hacer mi propia ceremonia, con las niñas y los familiares, por eso quería dedicarte estas letras antes de decirte adiós para siempre. 
No te preocupes, ya no te odio. No fue fácil vivir con un marido ausente, que estuviera más en el mar que en casa. No te culpo, era tu vocación. Me casé con un marinero, pero tonta de mi pensé que al enterarte de que iba a tener otro bebé decidieras dejar el mar, pero no lo hiciste y te fuiste. 
Así pase el segundo embarazo sola, con una niña tremenda y llevando la casa, trabajando y rezando a los dioses que te mantuvieran a salvo, pero tampoco me escucharon. No estuviste en el parto de Jane, aunque se que hubieras querido o al menos eso es lo que quiero pensar...

Esta carta es para decirte que te perdono. Puedes marcharte en paz, vuelve al mar donde sientes que es tu hogar y no te preocupes por nosotras. Estaremos bien. Siempre lo hemos estado. Precisamente por eso, sabías que podrías marcharte. 
Puedes irte en paz, esta todo bien.

Te amo.
Jude