Día 26: Elección
Tengo una memoria bastante mala para aquellas cosas que no me interesan, así que recordar exactamente algún diálogo o una frase es prácticamente imposible, así que tan sólo escribiré algo que suelo pensar mucho... ¿eso vale no?
Elección
Él estaba fuera del baño, mientras ella seguía encerrada dentro. Ninguno de los dos decía nada, pero ese silencio mostraba mucha más información que cualquier otro diálogo. Aunque estaba nervioso y quería acudir a su lado, espero pacientemente fuera, caminando de lado a lado, con las manos metidas en el bolsillo y esperando a que su novia saliera del servicio. Necesitaba hablar con ella, decirle que todo iba a estar bien, pero... ¿realmente lo estaría?
La puerta se abrió y salió. Tenía las mejillas rojas y húmedas, los ojos medio aguados y unas marcas en los labios de haberse mordido con fuerza. Antes de decirle nada la abrazó, ella tan sólo explotó a llorar. Teniéndola en sus brazos, temblando y tan indefensa supo que simplemente no se podía echar para atrás. Eran una pareja, se iban a casar y querían tener una gran familia... ¿Qué más daba empezar antes o empezar después?
- Lo tendremos.- le aseguró él, mientras le cogía de la cara, le secaba las mejillas y le daba dulces besos en la mejilla.
- Pero...- intento hablar ella con la voz rota.
- Tranquila, todo saldrá bien.
Hasta que ella no sonrió no se sintió tranquilo. La verdad era que estaba aterrado, pero no iba a echarse para atrás. Un bebé era una bendición, aunque seguramente tendrías que apretarse el bolsillo y cambiar un poco su estilo de vida, pero todo saldría bien.
Sonrió y le dio un beso en los labios antes de poner su mano en el vientre plano de la futura madre de su hijo.
Elección
Él estaba fuera del baño, mientras ella seguía encerrada dentro. Ninguno de los dos decía nada, pero ese silencio mostraba mucha más información que cualquier otro diálogo. Aunque estaba nervioso y quería acudir a su lado, espero pacientemente fuera, caminando de lado a lado, con las manos metidas en el bolsillo y esperando a que su novia saliera del servicio. Necesitaba hablar con ella, decirle que todo iba a estar bien, pero... ¿realmente lo estaría?
La puerta se abrió y salió. Tenía las mejillas rojas y húmedas, los ojos medio aguados y unas marcas en los labios de haberse mordido con fuerza. Antes de decirle nada la abrazó, ella tan sólo explotó a llorar. Teniéndola en sus brazos, temblando y tan indefensa supo que simplemente no se podía echar para atrás. Eran una pareja, se iban a casar y querían tener una gran familia... ¿Qué más daba empezar antes o empezar después?
- Lo tendremos.- le aseguró él, mientras le cogía de la cara, le secaba las mejillas y le daba dulces besos en la mejilla.
- Pero...- intento hablar ella con la voz rota.
- Tranquila, todo saldrá bien.
Hasta que ella no sonrió no se sintió tranquilo. La verdad era que estaba aterrado, pero no iba a echarse para atrás. Un bebé era una bendición, aunque seguramente tendrías que apretarse el bolsillo y cambiar un poco su estilo de vida, pero todo saldría bien.
Sonrió y le dio un beso en los labios antes de poner su mano en el vientre plano de la futura madre de su hijo.
¡oh, qué fuerte! No encuentro otra palabra que no sea esa. Pero ese final tan esperanzador y tierno, me ha gustado mucho.
ResponderEliminarHa sido interesante <3
Bye!
¿Fuerte? Bueno, es una decisión importante... y son cosas que siempre pienso, creo que fue un buen tema xD. Me alegra que te haya parecido interesante (?).
EliminarUn besazo cuídate.
La mayoría son unos cagados,pero bueno,algunos lloran,otros huyen... Para mi cada hombre es un mundo. Luego están los que se lo toman con una alegría tremenda como F. xD de esos supongo que hay pocos... Pero bueno :)
ResponderEliminarHas tenido suerte de encontrar a semejante ejemplar. Cuídalo bien.
EliminarTe quiero.