Reto 52: ¿Y si...?
Túturu~
Pronto será diciembre y con ello el fin de año, por lo que tengo que apretar un poco el acelerador con el Reto de 52 escritos. Obviamente si me lees bastante sabrás que justo en éste reto hago más trampas que un tonto, pero... es la única manera de poder hacerlo y al mismo tiempo, ponerme a reto.
Ésta vez uniré 4 consignas, posiblemente no las haga tal cual como dice la ley...pero más o menos seguiré las instrucciones...
He de escribir una Ucrónica, debo usar tres palabras (guisante,lunes y alfombra), escribir una carta de mi yo de 12 años y sobre una maldición familiar... a ver que me sale.
¿Y si...?
Estaba sentada frente al portátil, con varios libros abiertos, el programa de escritura hacía tiempo que se había cerrado y mi mente tan sólo vagaba de un lado a otro en la habitación. Buscaba algo que me hiciera inspirarme pero nada de lo que había ahí parecía iluminarme. El Lunes tenía que tener aquella hoja escrita, era la tradición en nuestra familiar... aunque para mi era prácticamente una maldición. Era cierto que como escritora debía tener la facilidad para escribir algo simbólico, pero... ¿qué hubiera pasado si no lo hubiera sido?
Con aquella pregunta en la mente volví cuando tenía 12 años, cuando comenzaba a hacerme ilusión ver mis palabras escritas en un papel y cómo todos mis seres queridos me alababan por ello. Casi como de golpe supe que escribir. Antes de ponerme a ello me levanté, busque un café y de camino arreglé un par de libros que estaban sobre la alfombra, alimente a mi tortuga con guisantes fríos y avisé a mi marido que entraría en catarsis por lo que nuestra hija quedaba en manos suyas. No era persona hasta que no escribiera esa maldita carta...
Hola Jennifer, comencé a escribir. Se me hizo raro ver el nombre de mi difunta hermana gemela escrito nuevamente. Desde su fallecimiento hacía más de 25 años jamás había sido capaz de nombrar a nadie con ese nombre. Era tabú y no sólo para mi. Tragué saliva y seguí apretando las teclas...
Te escribo como si aún estuvieras en el mundo, como si no hubieras muerto aquella fría noche de Enero. A veces me pongo a pensar cómo hubiera sido el mundo si tú no te hubieras ido y yo no hubiera conocido el mundo de la escritura... Quizás ahora estaría tirada en la calle, drogada o quizás, en un manicomio. ¿Por qué te preguntas? Es gracioso decirlo ahora, pero sé que asuste a papá y a mamá durante unos días... Cuando desapareciste del plante comencé a hablar contigo por la noche, como si estuvieras en la parte de abajo de la litera, fue fácil fingir que no habías muerto. La primera noche papá y mamá no dijeron nada, pensaron que así superaría tu muerte, pero los tres días siguientes ya se asustaron y me llevaron a un psicologo. Él me dijo que hablara contigo a través de las palabras y así lo hice... y gracias a ti, ahora soy una gran escritora, pero no voy a hablarte de como estoy ahora, sino de como hubiera sido el mundo si tú, no te hubieras muerto y yo jamás hubiera cogido una pluma.
Antes de darme cuenta las lágrimas me caían de los ojos una tras otra. No pude seguir escribiendo porque exploté en llanto. Esa maldita tradición familiar siempre hacía que volviera a morir por dentro una vez más, pero... ese día todo iba a acabar. Yo ya no era la cría de 20 años que para hacer feliz a su ancestral familia le hacía caso, ahora era una mujer, con una carrera propia, una vida y una familia a la cual las tradiciones ancestrales le importaba un carajo, por eso tras secarme los ojos me levanté del ordenador y cogí el teléfono. Me atendió mi madre con su voz nasal, le dije que no iría a la cena familiar, ella se indignó pero me dio igual. Cerré el teléfono y cuando me senté en mi ordenador para borrar todo lo que había escrito vi que al final del documento había un escueto Gracias. Sonreí al comprobar como el espíritu invisible de mi hermana se marchaba, al fin... había roto la maldición.
Triste relato, pero me gustó el final. Pudo haber escrito ese Gracias ella misma, o el fantasma de su hermana. Muy bien pensado el combinar las consignas para cumplir con los retos antes de diciembre. Cuando yo participé, no llegué a cumplir muchos retos que digamos. Debería haber hecho algo parecido. Me gustó mucho leerte y cómo será que hace mucho que no visito a los blogs amigos que veo tu diseño y sé que ha cambiado desde la última vez que pasé por acá xD Está muy lindo.
ResponderEliminarBesos.
¡Que gusto me da verte de nuevo por aquí!
EliminarSi, yo decidí hacerlo así más que nada... porque si no, no cumpliría el reto al completo. Además, también así es como más difícil. Me alegro que te haya gustado.
Un besito
Me parece una excelente idea, el relato quedo fantastico. La decisión de tu protagonista desató esa atadura familiar, y además dejó en libertad el espíritu de su gemela.
ResponderEliminarUn abrazo!
¡Gacias! Realmente no sabía como acabaría la cosa, pero estoy contenta con el resultado.
Eliminar¡Un besito!
Me encanta que la escritura sea una forma de superación y que sea un vínculo con el otro mundo. ¡Qué genial te quedó!
ResponderEliminar¡Un abrazo!
¡Si! Yo creo que también la usé en su momento como una forma de ayuda, creo que no es algo que solo me pasa a mi.
Eliminar¡Gracias!