Y nadie más que tú

Túturu~
Aquí sigo con mi batalla de ir quitando reseñas de mi libreta de apuntes. Hay que ver como uno se llena de películas cuando tiene tiempo libre. Es curioso porque hay días que ni veo nada y otros que me pimplo temporadas enteras de series... en fin, la vida es así.

Hoy vengo con una película que es original de Netflix, aunque eso no me lo trago ni con embudo, pero bueno... cada loco con su tema. ¿No? Es una película con un humor bastante ácido, que pinta ser una comedia romántica para terminar siendo un drama de éstos que te cortas las venas. Así que avisada estás...

Argumento: Abbie y Sam son una pareja que se han comprometido después de estar juntos durante toda su vida, y además tienen la buena noticia de ser padres muy pronto. La realidad les golpea cuando descubren que aquel bultito que tiene ella no es un bebé sino un tumor y maligno.

Ésta es una típica película que me da para hablar mucho, estirar el hilo y sacar mucho más allá de lo que muestra el film, así que... ponte cómodo.

Para empezar hay que decir que es una película que comienza como acaba. Es decir la misma escena cierra la película, o más bien el mismo mensaje que lo abre lo cierra. No es spoiler decir que la protagonista se muere, que durante todo lo que oyes de fondo es su voz desde el cielo explicando todo y como se va sintiendo, como va encontrando la solución para resolver todo lo que se le viene encima. Es duro, sobretodo al ser tan joven, al tener todo por delante...
Uno de los fuertes de la película es que a pesar de ser un drama muy duro, cruel y real es que saben encontrar la "gracia" de todo. Hay momentos de gracia, momentos que te ríes hasta más no poder y otros que te faltan minutos para recuperarte de la llantina. No es una película fácil de ver y más si te enfrentas a una situación parecida. Si en tu caso hay alguien que está pasando por ésta enfermedad, mi consejo es que la veas pero como si leyeras un libro de autoayuda, como algo para entender mejor todo lo que va a pasar o para encontrar algo de empatía para lo que estás sintiendo.

Dividiré mi reseña en dos grandes bloques: El amor y la enfermedad. En cada uno englobaré todo, no solo en lo explícito u obvio, sino iré mucho más allá.

El amor es un tema que está durante toda la película, en todas las escenas está esa esencia, ese mensaje tan fuerte y que puede con todo. No sólo el amor romántico, sino el de amistad, el de familia, el de amigos... e incluso de gente que se supone que solo está en un momento en tu vida.
La película explica como ellos se conocen, como su relación se formó de alguna forma y ha seguido así durante todo el momento. Vemos como Abbie intenta alargar su amor intentando controlar todo aquello que no podrá cuando se muera, como hace lazos con gente en su misma situación, como quiere a un enfermo que de pronto muere, como quiere a su familia... y ante todo, como ama a Sam. Su vida no gira en torno al cáncer, sino a él. ¿Cómo será su vida cuando yo no esté?¿Qué puedo hacer para ayudarlo?¿Qué pasará? Se plantea preguntas y debe encontrar la solución ya, sabiendo que no tiene tiempo... y eso mismo hace que pierda tiempo. Es aquí donde comienza el problema en la película, ella misma está perdiendo su tiempo, está gastando sus últimas energías en hacer algo que ya no le corresponde a ella y al mismo tiempo se está alejando de la única persona que realmente ama. Es cruel, es algo tan obvio y que te das cuenta tu que te dan ganas de ahorcar a la protagonista, porque tú sabes realmente cual es el objetivo de todo...

Y llegamos al otro gran bloque: La enfermedad. El cáncer es la enfermedad del siglo XXI, se lleva a cientos de personas cada año y según encuestas de cada 5 personas 1 la tiene. En mi caso puedo decir que mis dos abuelos maternos ha tenido cáncer, E también lo ha tenido y ahora una de mis hermanas mayores (hijas de E) también lo tiene y... pronto nos dejará. Es una realidad, horrible, triste y que causa mucha impotencia, no sólo para la persona que la padece sino para quien lo vive. Suelen decir que el cáncer no sólo se lleva al enfermo sino también a la familia...y ésta película te lo muestra. No con lágrimas y de forma dramática, simplemente te enseña lo que es la realidad y en cierto modo te explica las etapas del duelo, unas pasadas por alguien muy joven y eso cuesta de asimilar.
La película nos enseña otra cara del cáncer con una naturalidad real sin poner censura, ni colores donde no toca. Te muestra lo que es. La quimioterapia, la terapia, las radiografías y a los médicos intentando explicarle que disfrute lo que le queda.
Me encantó la relación que tiene ella con su enfermero de la Quimio, de como él se vuelca en ella y como hace la transición de un paciente a otro con tanta normalidad. Me encantó como sus amigos de terapia explican cada uno su forma de pasar ese amargo trance y como de una forma casi indetectable ves como los pacientes van desapareciendo de las reuniones. También me encantó como se hace amiga de un viejo gruñón que al final termina muriendo, de como con su sabiduría y cariño le hace ver que lo que esta haciendo está mal. O al menos para su punto de vista.
Los participantes de la película ven como la prota la caga, pero dejan que ella atraviese por ese proceso ella sola y al final, simplemente le acompañan con sus desastres.

Es una película ilustrativa, educativa y conciensadora. Creo que es una de las mejores que he visto que han tratado éste tema. El drama justo, el amor preciso y las explicaciones exactas. No intenta ir más allá, a lo místico o mágico, o a lo chill out. Simplemente ésto es lo que hay y listo. No busques más. Sin ninguna duda es una película que recomiendo, eso si... cada uno ya sabe donde se mete.

No he hablado de nada más porque en si el argumento se lo lleva todo y lo demás son detalles, que realmente ¿para que hablar? No hacen mejor lo que ya es, y tampoco estropean lo que no hay.

10/10