La mafia de la lactancia y otras cosas...


Túturu~
¡Feliz Navidad y próspero año nuevo!
¿Qué tal han ido las fiestas?¿Has comido mucho?¿Te han traído todos los regalos que querías?¿Si o no? ¡Cuéntamelo! Por mi parte me han traído bastantes cositas, también a Freya y a mi Sr. Marido... así que estoy bastante satisfecha éste año... además, yo ya tengo el mejor regalo que puedo pedir. ¡Mi hija!

Antes de que se acabe el año y tenga más ideas que escribir, quiero hablar sobre un tema que me ha estado molestando mucho desde que me quedé embarazada. Ya antes notaba un poco la presión por conocidas, pero no fue hasta que lo viví en carnes propias que comencé a pensar y he llegado a una conclusión... ¿Qué les importa a ellos?
Desde que te quedas embarazada hasta que tienes al bebé, hay una pregunta que todo el mundo te hace, y dependiendo de tu respuesta eres clasificada entre "buena madre" o "mala madre". Una pregunta maliciosa y que no tiene más fin que llenar el ego de los que hacen la pregunta, y también para satisfacer sus conocimientos sobre un tema que ni les afecta ni les incube.  
"¿Y piensas dar el pecho?" La dichosa pregunta sale de la boca de la gente desde el momento que informas que estas preñada. En mi caso he de decir que esa duda la tenía muy presente desde el momento uno de mi gestación, más que nada porque tengo TOC y tengo medicación que tuve que suprimir durante los 9 meses, obviamente debía saber si podía o no dar el pecho con las pastillas, así que durante ese tiempo investigue e investigué hasta que supe que no había problema en ello y pude responder a esas cuestiones de forma positiva. 

Durante los 9 meses estuve tranquila con mi decisión de dar el pecho, pero cuando nació mi hija la cosa cambió un poco. Por motivos que aún no entiendo del todo, mi leche no le aportaba suficiente azúcar y me dijeron que debía darle un poco de leche de fórmula para que le subiera el azúcar. Así que me enseñaron como debía darle la leche en una jeringa y alternarla con mi pecho...
Obviamente en ese entonces mi cabeza de madre preocupada solo quería que mi hija estuviera bien y decidí que no le daría pecho sino biberón. En ese momento sentí como todo el personal me juzgaba, incluso la misma pediatra me miraba de forma diferente... No fue hasta el día siguiente que parecieron aceptar mi decisión pero tuvo que pasar 24h para eso. 
En ese momento me sentía fatal. No sólo porque mi hija no estaba bien, sino porque el profesional me juzgaba por algo que era lo mejor para mi hija y encima para colmo la gente externa arrugaba la nariz al ver que no sacaba mi teta y sacaba el biberón.
Entiendo que la leche materna es lo mejor, que no hay nada más natural y bueno para el bebé, pero eso no es motivo suficiente para juzgar y hacer sentir mal a una persona. No sólo por el hecho de que no es asunto tuyo, sino porque no sabes los efectos negativos que causan esas palabras... a mi al menos aún me afectan, porque no fue una decisión plenamente consciente que tomaba. Tenía miedo, poca información y los profesionales no daban alternativas que pudieran facilitar la toma de mi decisión. 

Desde ese momento cada vez que alguien me preguntaba ya esperaba a que me dieran la charla. Incluso cuando das explicaciones coherentes parece que no tienen efecto, que tu decisión es incorrecta y que todas las demás son las mejores. Al menos en mi caso no fue una decisión traumatica... pero ¿Y si lo hubiera sido? A veces las madres ni tienen la elección y otras simplemente ni les comentan... y ahí es cuando el personal sanitario la caga.
Siento que a pesar de que todo está muy bien estudiado, bien marcado y estipulado, no dan opciones alternativas a situaciones reales que puedan ocurrir. Es como si la madre no tuviera elección, por mucho que esté la opción de la teta y el biberón al mismo tiempo. Debes elegir sólo una y cuando lo haces, olvídate de volver atrás... 
Créeme que esa incapacidad de ser flexible duele en el alma, incluso cuando sabes que puedes dar pasos atrás y seguir el camino que has elegido... la sombra te persigue. Tengo la suerte de que Freya pudo tomar mi leche los dos primeros días y consiguió el agarre de la teta, y aún ahora puedo decidir si darle el pecho o no... Y sabiendo eso, tengo el eco de los comentarios en mi cabeza. Sé que las opiniones no deben importarme, pero cuando un médico te mira mal... ¿Como no sentirte así?

El tema de la mafia de la lactancia es algo tan fuerte que ahora están comenzando a aceptar que hay una excesiva presión hacia las madres de hacer la lactancia materna. Nadie dirá que está mal y que no es lo mejor para el bebé, pero como he dicho antes no todas las mujeres tienen la oportunidad de hacerla, o incluso han decidido no hacerlo... ¿Y qué más te da lo que decida? 
En general la gente no sabe el esfuerzo que supone dar el pecho, los sacrificios que supone y tampoco el dolor tanto físico como psicológico de hacerlo... y lo peor de todo, es el dolor físico al saber que no puedes darlo y lo que supone eso hacia la sociedad. 
Por mi parte he logrado hacer que mi familia (más cercana) acepte el hecho de que no le de el pecho a Freya. A veces insisten y a veces pienso en intentarlo... fue así como descubrí algo maravilloso y que me encantaría que la sanidad lo dijera, que se corriera la voz y que todas las madres lo supieran. 
Y lo que descubrí se llama "lactancia seca", es ofrecerle el pecho al bebé con el único fin de que succione sin intenciones alimentarias. Si, como un chupete. ¿Y sabes qué? Es maravilloso. En cierto modo es un engaño para el cerebro de la madre, puesto que la criatura sigue alimentada por el biberón y cubre su necesidad de chupar algo y se tranquiliza. Es un engaño para la mente de la madre porque sabes que no cumple la principal función, pero al mismo tiempo suples esa necesidad básica de amantar a tu bebé. Esta la conexión entre madre e hijo, la sensación del chupeteo (lo sé, suena mal... pero es así) y ves como tu bebé se va relajando, oliendote, sintiéndote... y en cierto modo tu te sientes más tranquila. Simplemente es maravilloso.

En el mundo de la maternidad hay temas que causan rechazo y debate, entre ellos el de la lactancia que me parece absurdo y que no debería ni ser considerado tema de debate, puesto que es una decisión que solo les influye a dos personas: la madre y el bebé. Punto. Como mucho, el padre podría opinar... pero nadie más. Y a parte de ese tema está el uso del chupete. ¿Cuantas veces no has oído que el chupete es malo? Incluso hay páginas enteras que hacen listas de pros y contras sobre el uso del chupete, y también médicos que están a favor y otros que están en contra. Y otra vez si le das el chupete a tu hijo te hacen sentir como mala madre... En serio, ¿es necesario?
A éstas personas se les debería enseñar páginas donde médicos dicen que son necesarios y sus motivos, también ponerle cientos de casos donde el uso de chupete es efectivo y otros no. 
No todos los bebés reaccionan igual, no todas las madres son igual y no todas las ideas son igual.

En definitiva, con ésta entrada tan sólo quería desahogarme un poco sobre éste tema que me calienta bastante y me afecta, y también para seguir diciendo que no hay una forma correcta y perfecta de criar a un bebé, sino muchas diferentes y adaptadas a cada familia, así que... si te ves en esta situación como me he visto yo... deberías estar tranquila, después de todo cada madre sabe lo que su hijo necesita y no los demás. Si tu estás tranquila y eres feliz... ¡Que les den a los demás!

Comentarios

  1. Hay algo que critico es el sentido común, el dar algo por sabido y comprobado, inmutable. Y juzgar a las personas por eso.
    No tienen en cuenta que algo certero, algo demostrado, pueda tener sus excepciones. Y juzgan a personas para los cuales no se ajusta ese hecho.
    Lo que contás es un ejemplo de eso.
    No hay una forma correcta, sino muchas. Bien dicho.
    Como esa frase final.
    Besos.

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    1. Exacto, es triste que no todo el mundo lo vea igual y lastima bastante esas palabras.
      Pero bueno... así es la vida.
      Un besote

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  2. Lo único que se amiga que esta sociedad te juzgan todo el tiempo si haces bien o mal las cosas. Vos céntrate en tu propio mundo y el de tu hija, la gente son puras "hormigas", así como se diría en Argentina "no les des pelota", lo único que te debe importar es que estés bien vos y tu bebé.

    Les mando un besote a las dos desde Plegarias en la Noche.

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    1. Si, no queda otra que fingir que no importa y creer en tu propio instinto. Graciaass

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  3. Hay excesiva presión para todo en esta sociedad.
    Felices Fiestas a los tres!

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  4. Muchas felicidades a los tres en estas fiestas. Me llamó la atención lo que pasó en tu caso, ya que soy una de esas personas que todavía no se ven en la situación de traer a un bebé a este mundo y solo puedo guiarme por lo que otros cuentan. Siempre es valioso conocer diferentes voces, así que es muy valioso lo que estás contando. Yo nací siendo intolerante a la lactosa, por lo que mi madre no pudo amamantarme con su pecho. Si hoy en día estás viviendo estos inconvenientes, no me imagino lo que ella habrá tenido que aguantar hace tres décadas. La sociedad espera demasiadas cosas de las mujeres, en cada aspecto de nuestras vidas. Está muy bien que nos vayamos liberando y haciendo lo mejor para nosotras, cuando nos toque hacer una diferencia. Te felicito por tu decisión, por vos, por tu hija. Que los demás se aguanten :P
    Muy feliz fin de año. Un beso enorme.

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