Safari en Bostón, hombres, copas y caza mayor

Túturu~
¿Cómo estás llevando la semana? Yo estoy feliz, algo mosqueada por cosas del trabajo... pero bueno. La vida adulta es aceptar cosas que no puedes cambiar. ¿No?
A veces me gustaría volver a ser una adolescente sin problemas, pero pasar toda la efervecencia hormonal otra vez... me seduce bastante poco a decir verdad.

Hoy vengo con el segundo libro que me he leído. A diferencia del anterior, éste es el típico que lo haces para pasar el tiempo. Una novela rosita, de risa asegurada y que no te deja ningún mensaje más allá del de ¿pasarselo bien?
O al menos esa es la idea con la que te plantea el autor, pero poco a poco te va seduciendo de una forma especial y terminas con un bonito mensaje final. Al menos así yo lo sentí.




Argumento: Después de que su novio rompiera con ella, Jackie decide desmelenarse, ir a la casaría y superar aquel romance tormentoso que tanto daño le hizo. En ese periplo donde la sensualidad, la tristeza y las inquietudes Jacki va descubriendo realmente lo que quiere en la vida y descubre una manera diferente de ser feliz.

Autor: Sarah Mlynowski.

Con un total de 256 páginas es una novela bastante ligera de leer. No está escrito con grandes pretensiones, pero tampoco baja su nivel de literatura. No es una lectura sibarita, tampoco encontraras grandes párrafos magistrales y mucho menos una redacción delicada y estricta.
Es una novela rosa, de risas, de charlas y historias de la vida de una mujer despechada que se quita las bragas al primero que le contonee el culo a su gusto.

Es una historia que no se puede saber muy bien por dónde va a salir, al principio crees que irá por una parte pero al final sale por otra. Hay que decir que es una novela solo de amoríos, de luchas personales y quizás de algo de pensamiento interior, pero no mucho más.

No tengo mucho que decir de esta obra, honestamente no me acuerdo de nada más, así que imagínate no puedo decir nada más.


6/10